Redacción CNTI
“NOSOTROS TAPAMOS LA VÍA PORQUE NOS QUITABAN LA VIDA”
Taita del pueblo Pasto.
Es tanto el frío nariñense que la gente te abriga con la dulzura de sus palabras de origen Quechua que se han resistido a desaparecer. Así como te brindan un cafecito con maicitos también nos compartieron las luchas que emprendieron para proteger los territorios de los pueblos Pasto y Quillasinga. Estas dos naciones se resistieron a la salvaje colonización española y hoy en día se han reivindicado como naciones.
El Observatorio de Derechos Territoriales de los Pueblos Indígenas de la Comisión Nacional de Territorios Indígenas CNTI estuvo compartiendo y conociendo el territorio ancestral Pasto y Quillasinga durante los días 23 y 24 de agosto de 2022. En esta visita acompañaron una parte del equipo técnico del Observatorio, algunos delegados y en especial el acompañamiento del equipo de Tenure Facility, la entidad aliada del ODTPI de la CNTI.
El territorio de Guachucal, que en lengua ancestral pasto significa pueblo en lo alto del agua, recibió a la delegación de la Comisión Nacional de Territorios Indígenas, en donde se informó el avance de las acciones de tutela presentadas a favor de los pueblos Pastos y Quillasinga. Estas acciones favorecen a los resguardos coloniales y en la formalización de todos los resguardos de estos dos pueblos. Cabe resaltar que son territorios en su mayoría con títulos coloniales, lo cual significa que sus luchas vienen desde los años 1700.
Por otra parte, los resguardos indígenas Pejendino y Refugio del Sol del corregimiento El Encano y la Laguna Pejendino del pueblo Quillasinga tienen un proceso de lucha por la defensa de los territorios, en particular, el resguardo Refugio del Sol que sostenido una fuerte lucha para declarar territorio Quillasinga el lugar sagrado de la laguna de la Cocha y se busca que sea protegido con toda su biodiversidad que lo compone de la explotación indiscriminada del turismo y del cultivo de trucha.
A través de estos recorridos territoriales que realiza la Comisión Nacional de Territorios Indígenas, se ha enfatizado que el territorio no es únicamente la tierra, sino que las aguas, los cielos, el mar, son territorios ancestrales que deben ser declarados y reconocidos como territorios de las naciones indígenas.
Defender el territorio es defender todo tipo de vida espiritual y física de la madre tierra.