Redacción CNTI
Las Mesa Permanente de Concertación (MPC) convocó a la Cumbre Política e Ideológica de los Pueblos y Organizaciones Indígenas de Colombia en territorio Ancestral del Pueblo Arhuaco, centro Simunurwa, del municipio de Pueblo Bello, departamento del Cesar, del 2 al 5 de junio de 2022. El encuentro tuvo por objetivo fortalecer la unidad de los Pueblos y organizaciones indígenas de Colombia.
La cumbre comenzó con una nutrida participación de los delegados de la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), Autoridades Tradicionales Indígenas de Colombia (Gobierno Mayor), Autoridades Indígenas de Colombia por la Pacha Mama (AICO), Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana (OPIAC), ex constituyentes Indígenas, organizaciones del Pueblo Wayuu y por supuesto los anfitriones, el pueblo Arhuaco a través de la Confederación Indígena Tayrona (CIT).
Los delegados de las organizaciones y de los pueblos indígenas llamaron a la unidad y fortalecimiento de los procesos de base que se encuentran en territorio. Los Pueblos Indígenas no han sido ajenos a las transformaciones culturales de la modernidad, sin embargo, a pesar de las diferentes imposiciones institucionales occidentales han sabido resistir y por supuesto re-existir siempre en el cuidado del territorio.
Es imperante, que la unidad de los pueblos, que es un sueño que viene por parte de los abuelos de cada rincón de Colombia, se siga tejiendo. Así como se comenzó en la década de los 70`s con muchos mayores y mayoras que se trasladaban en la búsqueda de la hermandad y juntanza de diferentes pueblos indígenas para proteger el territorio, hoy no se nuble ese propósito. Se recuerda que las grandes organizaciones nacionales indígenas son frutos de la búsqueda de hermandad entre pueblos y que hoy en día han sido pilares fundamentales para exigir los derechos de la madre tierra y los derechos de los pueblos Indígenas.
Hoy cada día, occidente desde diferentes formas de colonizar, ha violentado en gran manera los territorios indígenas. Los bosques, los nevados, los ríos, los aires, son un botín para el Estado colombiano. Nunca ha entendido que cada parte del territorio, además de tener un espirito grande que siente, piensa, les está dando una vida digna a la humanidad entera.
La Cumbre ratifica que la unidad de los Pueblos Indígenas es a través de la hermandad entre la diversidad. Las organizaciones nacionales indígenas, la MPC y demás formas de organización, que en este encuentro incluyen los cabildos en contexto de ciudad, deben propender a las autonomías territoriales de cada pueblo indígena.
Precisamente el evento se realizó el territorio denominado como corazón del mundo, por los Pueblos Arhuaco, Kogui, Wiwa y Kankuamo. Y se llama así porque para adentrarse a las entrañas de la Sierra Nevada de Santa Marta se necesita despojarse de las divisiones humanas y entender que la tierra misma convoca a sus hijos para hacer un llamado a la unidad de los Pueblos Indígenas de Colombia. Desde el Corazón del Mundo se siembra una semilla de unidad para cuidarla durante el tiempo y el espacio. Cada pisada sea para proteger el territorio y por supuesto la pervivencia de los pueblos indígenas, siguiendo el orden natural de la Ley de Origen y el Derecho Mayor.